Hernias y el sobrepeso: ¿qué relación tienen?
El sobrepeso y la obesidad son problemas de salud cada vez más frecuentes en nuestra sociedad, y no solo aumentan el riesgo de enfermedades como la diabetes o hipertensión, sino que también elevan la probabilidad de desarrollar una hernia. Pero, ¿por qué ocurre esto y cómo puede afectar a tu salud?
1. Antecedentes familiares
Si tus padres o hermanos han tenido hernias, existe una mayor probabilidad de que desarrolles una debido a una predisposición genética a la debilidad en la pared abdominal.
2. Edad
A medida que envejecemos, los tejidos musculares pierden fuerza y elasticidad, aumentando el riesgo de hernias.
3. Sexo masculino
Los hombres tienen más probabilidades de sufrir hernias inguinales debido a diferencias anatómicas en el canal inguinal.
4. Obesidad
El exceso de peso incrementa la presión intraabdominal, debilitando las paredes musculares y favoreciendo la aparición de hernias.
5. Embarazo
El crecimiento del útero durante el embarazo aumenta la presión sobre la pared abdominal, lo que puede provocar hernias, especialmente umbilicales.
6. Tos crónica
Tos persistente, por condiciones como asma, EPOC o tabaquismo, ejerce presión repetitiva en el abdomen y favorece la formación de hernias.
7. Estreñimiento crónico
Hacer fuerza al evacuar genera picos de presión en el abdomen, debilitando progresivamente la pared muscular.
8. Levantar peso repetidamente
Trabajos o actividades que requieren levantar objetos pesados aumentan el riesgo, especialmente si no se utilizan técnicas adecuadas.
9. Cirugías previas
Operaciones en la zona abdominal pueden debilitar el tejido y predisponer a hernias incisionales (en el sitio de la cicatriz quirúrgica).
10. Enfermedades que aumentan la presión intraabdominal
Patologías como ascitis (acumulación de líquido en el abdomen) pueden predisponer a la formación de hernias.
Conclusión
El sobrepeso es un factor de riesgo importante para desarrollar o complicar una hernia. Cuidar tu peso no solo mejora tu calidad de vida general, sino que reduce las posibilidades de que una hernia aparezca, crezca o derive en una emergencia.